Tú ya sabes lo que se viene: días y días de reuniones sociales, compromisos familiares, compras, regalos y mucha, mucha comida. ¿Suena sexy? No mucho. Son fechas en las que nuestro metabolismo va a estar tan ocupado haciendo la digestión que nos entran ganas de cancelar el sexo hasta el Día de los Enamorados. ¿Pero qué podemos hacer si no queremos renunciar al sexo estos días? Pues adaptarnos. Aquí os dejamos siete posturas compatibles con la mayoría de atracones.
La cucharita
La cucharita es la postura de los vagos, porque es ideal cuando te entran ganas de follar mientras estás durmiendo y te da pereza despertarte del todo. Esta postura también es una aliada en las digestiones complicadas. Tumbarse sobre el costado izquierdo favorece el tránsito digestivo y que el estómago se vacíe antes. Además, qué mejor manera de rematar una buena comida que con una siesta, y qué mejor manera de rematar esa siesta que con un polvo.
Masturbación recíproca
Cuando te sientes como una boa que se acaba de zampar un jabalí lo último que te apetece es complicarte. Esta puede ser una buena ocasión para redescubrir lo morbosas que son ciertas prácticas que a veces desechamos por considerarlas menores. Intenta dar placer solamente con tus manos. ¡Prohibido usar ninguna otra parte del cuerpo! En cuanto te inventas unas normas, cualquier cosa se convierte en un juego.
El misionero
Este es un clásico entre los clásicos que, siempre que no te apoyes mucho sobre la barriga, te puede venir bien porque no requiere grandes esfuerzos. Aquí la gravedad juega a nuestro favor y solo tendremos que culear un poquito, no mucho. ¿Es una postura aburrida? ¿Monótona? Más bien diríamos que es como esa amiga del cole que nunca te falla cuando la necesitas ni te reprocha que no la llames nunca.
El perrito vago
Es como si al perrito de toda la vida no le quedaran fuerzas para levantar el culo. Y eso es exactamente lo que os va a pasar después del pavo, el solomillo, las hallacas, la lombarda, los turrones o lo que sea que cenéis allá donde estéis. La persona que recibe se tumba boca abajo sin levantar la cadera mientras que la pareja le monta por detrás. Fácil, ¿verdad? Pues no lo compliquemos. Hoy no es el día.
Una ayudita tecnológica
Muchas personas reservan los juguetes sexuales para la intimidad pensando que no son necesarios cuando la pareja está presente. Otras parejas, sin embargo, los incluyen dentro de su repertorio habitual. Sea cual sea tu caso, no estamos para rechazar ninguna ayuda cuando acabas de cebarte como un lechón. Siempre te podrás fiar de la tecnología cuando a ti te falla el ánimo, la precisión y la templanza.
Finger-banging
Los americanos siempre tienen nombres divertidos para cualquier práctica sexual, incluso para las más humildes. ¿Un simple dedo? ¡No! Finger-banging, que sería algo así como una explosión digital. Aquí no se trata de estimular tímidamente con el dedito, sino de transferir a la mano toda la furia que le falta al resto de tus órganos. ¡Libera todo es tu poder en tu martillo percutor! Pero con cuidado, que son malas fechas para acabar en urgencias.
¿Y tú? ¿Tienes otras posturas sexuales que utilizas cuando se te complica la digestión? ¡Compártelas con el mundo!